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La Dirección General de Concesiones confirmó la licitación del nuevo Corredor Ferroviario de Carga de la Región de Antofagasta. Este servicio de trenes, enfocado en el sector minero, unirá a lo largo de casi 300 kilómetros de vías las ciudades de Calama, Sierra Gorda, Antofagasta y Mejillones.
Este proyecto es uno de los más relevantes del país en cuanto a servicios ferroviarios. Según el Informe de la Corporación de Bienes de Capital, del sector Obras Públicas su costo total asciende a 386 millones de dólares (a modo de comparación, el documento destaca que la extensión de la Línea 2 del Metro a San Bernardo tuvo un costo de US$ 476 millones).
Al ser declarada de “interés público”, esta propuesta privada entra en etapa de estudios con vistas a ser licitadas dentro de un año.
La iniciativa, presentada en 2019, consiste en la construcción, mantención, conservación y explotación de una nueva vía férrea enfocada en el rubro minero, que no requeriría subsidio del Estado e implicaría un plazo de concesión de 33 años. Competiría así con el servicio Antofagasta-Bolivia, que cumple servicios similares en la región.