La tasa de interés promedio para los créditos hipotecarios registró en agosto una nueva caída, promediando 4,29% anual, según informó el Banco Central. Esta cifra representa un descenso respecto al 4,36% de julio y marca su nivel más bajo desde agosto de 2023. “Estamos viendo un escenario de mayor competencia entre las instituciones financieras, lo que se traduce en mejores condiciones para los solicitantes de crédito”, destacó un analista en El Mercurio.
El contexto es la implementación del subsidio al dividendo para viviendas nuevas, medida que busca dinamizar el sector inmobiliario. De acuerdo con la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif), más de 11.000 solicitudes ya han sido aprobadas, por un monto cercano a US$1.200 millones, lo que equivale al 38% de los 50.000 beneficios contemplados en la ley. “Este incentivo ha generado un aumento significativo en la demanda, especialmente en segmentos medios”, afirmó un vocero de la Abif.
Expertos anticiparon que la baja en las tasas podría mantenerse en el corto plazo, en la medida que se controlen las presiones inflacionarias. Para los potenciales compradores de vivienda, una tasa más baja implica dividendos mensuales menores y, por ende, una mayor capacidad de endeudamiento. “Pero no basta con mirar la tasa; hay que evaluar la capacidad de pago a largo plazo”, subrayó Alejandro Alarcón, académico de la Universidad de Chile.
En el sector inmobiliario, la expectativa es que la combinación de subsidios y tasas más bajas impulse las consultas, reservas y ventas en lo que resta del año. “El mercado está reaccionando positivamente, pero el desafío será sostener este ritmo una vez que los beneficios extraordinarios terminen”, señaló un representante de la Cámara Chilena de la Construcción.